Pieza clave

Echar chal
Cuerpo

El arma secreta que necesitamos para acabar con la temida resistencia a los antibióticos podría estar escondida en nuestra esponja de cocina. En estos utensilios habitan todo tipo de bacterias y microorganismos, conformando un pequeño pero completo ecosistema donde incluso hay depredadores: los bacteriófagos o fagos.

A un grupo de estudiantes del Instituto de Tecnología de Nueva York (EUA), liderados por el profesor asistente Bryan Gibb, se le ocurrió buscar en sus propias esponjas de cocina fagos aptos para combatir a bacterias que no pueden ser eliminadas mediante antibióticos ni limpiadores.

Conocer la variedad de bacterias que un fago puede infectar es clave para determinar su capacidad para tratar infecciones resistentes a los antibióticos: “Un nuevo bacteriófago puede o no albergar un potencial terapéutico, por eso es emocionante. Y encontrarlos es uno de los objetivos de este proyecto de investigación”, comentó a los medios Gibb.

El trabajo se presentó durante la reunión de la Sociedad Americana de Microbiología, celebrada a fines de junio pasado.